Al final de cuentas, todos tenemos sólo sueños
a veces arriba, a veces abajo,
pero por el mundo entero, vamos rodando
listos para el combate, con anhelo, con miedo.
Salvajes, libres, perdidos,
solos… a veces, tan solos.
Rostros decididos.
Sueños que son un tesoro.
Al final de cuentas, todos perdemos sólo sueños.
Abatidos cuando la puerta se cierra.
En tu cabeza hay una tormenta.
Se siente como una derrota, no hay consuelo.
Rotos, nos sentimos rotos, sin aliento.
A veces… sólo queremos darnos por vencidos.
Rostros decaidos.
Sueños que se han vuelto un tormento.
Al final de cuentas, todos somos sólo sueños.
Cumplidos.
Perdidos.
Anhelados.
Sepultados.
Un montón de sueños que se desvanecen.
Un montón de sueños que se honran
Sólo un monton de sueños que envejecen.