La industria de la moda es la segunda más contaminante después de la petrolera y antes de la ganadera. Y los daños medioambientales aumentan a medida que la industria crece.
¿Qué es la moda rápida o fast fashion?
Es un modelo de negocio que se centra en la producción masiva de prendas que genera mayor consumo y que cambia rápidamente, respondiendo a las tendencias del momento y sobre todo, con un precio bastante asequible. El fundador de este modelo de negocio es la firma Inditex. La mayoría de estas prendas son desechable pues no tienen buena calidad y son desechadas rápidamente, generando la necesidad de comprar más y más. Antes de la llegada de Shein, la moda rápida lanzaba 52 colecciones al año, pero ahora gracias al nuevo magnate de la moda rápida se lanzan hasta 2000 colecciones al año, produciendo más de 120 mil millones de prendas al año.
Esta industria usa al rededor de 93 mil millones de metros cúbicos de agua en la producción textil; por ejemplo, para una camiseta de algodón se ocupan 2500 litros de agua. Las aguas residuales contienen sustancias tóxicas como plomo, mercurio y arsénico, entre otras, estas son extremadamente dañinas. La contaminación también llega al mar y acaba extendiéndose por todo el mundo.
Medio millón en México consume fast fashion, desperdiciando más de 200 toneladas al año
¿Moda sostenible?
Bangladesh es el segundo productor de ropa después de China y existen normas ambientales que deberían llevarse a cabo como usar el agua, filtrarla/depurarla y no verterla en los ríos, pero lamentablemente como en todo hay corrupción y no todas las fábricas realizan este proceso ya que no es rentable, pues la inversión en la depuradora es bastante alta y las marcas se hacen de la vista gorda. Estas fabricas engañosas usan materia prima que no cumple con los estándares permitidos y vierten el agua en los ríos y con ello, lamentablemente se ha alterado el ecosistema ya que la mayoría de los ríos en Bangladesh están contaminados, el agua ya no tiene oxígeno por lo tanto los peces y las plantas se están viendo afectados, y con ello el alimento para los habitantes. A pesar de que el agua no es potable, es usada para el ganado así como para la agricultura; productos contaminados que llegan a los hogares.
Los expertos advierten que la falta de agua potable puede destruir el equilibrio de la sociedad y hacer inhabitables muchas zonas. Y esto es un grave problema que se viene.
Algunas marcas de moda rápida ofrecen dejar tus prendas usadas a cambio de descuentos para comprar ropa nueva, pero, ¿este proceso es realmente posible? Según los expertos este proceso es prácticamente imposible pues las prendas que en la actualidad llevamos a este cambio son de materiales producidos con petróleo crudo y es difícil de reciclar moda rápida desechada. Se sabe que se clasifican hasta 25 toneladas de ropa al día, la que esta en buen estado se vende, otro pequeño porcentaje se usa para producir trapos de uso industrial y el resto se quema o se tira, y esto nos lleva al problema ambiental que se vive en algunos países como Rumania y Chile. En los barrios pobres de Rumania las prendas desechadas son vendidas a personas que no cuentan con calefacción, estas son quemadas para generar calor en sus hogares contaminado gravemente el aire; en Chile la ropa de todo el mundo es tirada en el desierto de Atacama, provocando incendios. Se dice que este vertedero se puede ver incluso vía satélite. Esto causa contaminación atmosférica y acuática provocando enfermedades como infecciones pulmonares, accidentes cerebro vasculares, cáncer, entre otras.
La moda rápida nunca será sostenible , la prenda sostenible es aquella que no se produce.
Otro factor importante que nos perjudica silenciosamente es el lavado de nuestra ropa, pues aporta uno de los mayores problemas de contaminación que hoy en día enfrenta el mundo, la contaminación por plásticos. Un estudio reciente demuestra que el uso de fibras sintéticas libera microfibras de plástico al aire. Según el estudio, una persona “podría liberar al medio ambiente casi 300 millones de microfibras de poliéster al año lavando su ropa, y más de 900 millones al aire simplemente usando las prendas”. También se descubrió que estas microfibras llegan a nuestros océanos y por lo tanto a nuestra cadena alimentaria.
Según las cifras hasta el 2019 con toda la cantidad de ropa que ya existe, se podría vestir a toda la población del mundo hasta por 10 años.
Este problema es de todos y estoy segura que después de leer lo anterior te preguntarás: ¿Entonces que me pongo?, ¿si yo dejo de comprar habrá un cambio? Es un tema complicado pero esto no significa perder el gusto por la moda sino disfrutar lo que compramos, así como comprar con inteligencia, buscar calidad, comprar menos y tirar menos. Todos podemos agregar nuestro granito de arena y compartir este tipo de información para que esté al alcance de todos.
Comprar ropa con bastante frecuencia fomenta que se mantenga el mismo modelo de producción rápida de ropa (fast fashion).
Algunos cambios que puedes hacer son:
- Descubre tu estilo personal para que no te dejes llevar por las tendencias.
- Compra de manera inteligente para que siempre tengas que ponerte
- Elije fibras naturales o semisintéticas.
- No te guíes por las marcas, siempre lee las etiquetas.
- Lava la ropa de manera adecuada y siguiendo las instrucciones de uso.
- Repara tu ropa, no la tires si aún tiene arreglo.
- Si ya no es tu estilo, dónala, véndela o incluso puedes customizarla (modificarla).
- Busca tiendas de segunda mano, en estas tiendas encontraras opciones que van con tu estilo, calidad e incluso joyas de las abuelitas.
En este articulo solo estamos tocando el daño ambiental pero la industria de la moda rápida también afecta otros factores como la explotación de empleados y nuestra salud por los materiales usados en las prendas. Si quieres saber más del tema escríbelo en los comentarios.
Estos factores no solo perjudican a los países mencionados si no a todos. Si llevas a cabo otra acción para minimizar este consumo compártelo en los comentarios.
